Proyectos de ensanches en el norte de Pamplona (1885-1901)
A finales del XIX y principios del XX, el Ayuntamiento barajó diversos proyectos que contemplaban la creación de ensanches por el norte de la ciudad en vez de por el sur. El Ayuntamiento deseaba extender la ciudad por el sur que era la prolongación más lógica pero era consciente de la dificultad que entrañaba el derribo de las murallas, con abierta oposición del estamento castrense. De ahí que retomará su lucha por acabar con la prohibición de construir en las llamadas «zonas polémicas». El Ministerio de la Guerra tras muchos tiras y aflojas accedió a estudiar el Ensanche de Pamplona por el norte. De hecho el primer proyecto de Ensanche por el norte fue elaborado por los propios militares. Se presentó el 15 de agosto de 1885 y fue obra del coronel de ingenieros José Luna y Orfila. Ocupaba los terrenos de la Rochapea más cercanos al meandro del río y que coincidía con la Rochapea Vieja así como los de la zona más cercana a la Estación del Norte, lo que hoy sería el barrio de San Jorge, tanto en el lado norte de la actual avenida de San Jorge como en la zona sur. Ambos núcleos poblaciones tenían una curiosa disposición radial, como se puede observar en el plano adjunto. Las casas no podían tener más de 2 pisos y un máximo de 10 metros de altura y debían de carecer de sótanos o cualquier otro escondrijo que sirviese para ocultar tropas o explosivos. Las calles debían tener una anchura de 12 a 16 metros. Se reservaban solares para la iglesia, mercado, escuela y «si sobraba» para jardín público. Sin embargo la propia Memoria ponía de hecho, a las claras, las deficiencias de este proyecto. Algunos estaban muy a la vista. Los núcleos poblacionales estaban demasiado cercanos al rio lo que redundaba en un alto grado de humedad de los terrenos, que hacía muy poco salubre la zona y apenas había pendiente para el saneamiento, esto es, para los desagües. Poco tiempo después, el arquitecto municipal, Julián Arteaga y la Comisión de Fomento desaconsejaban acometer este proyecto de Ensanche. Este plan se vería paralizado, no obstante, por la Real Orden de 1896 que proponía replantear las zonas polémicas en toda España.
El segundo proyecto de Ensanche en el norte, ocupaba terrenos de Rochapea, Magdalena y el barrio de la Estación. Este proyecto a diferencia del anterior de origen militar, se presentó por iniciativa municipal que sin renunciar al Ensanche por el sur consideró que era una buena oportunidad impulsar la construcción en esta zona de la ciudad, para «llevar las innumerables viviendas pobres, cuadras y vaquerizas situadas en el centro de la ciudad». Por Real Orden del 21 de diciembre de 1899 se concedió el Ensanche de Extramuros por el que se permitía construir en las llamadas «zonas polémicas». El proyecto se parecía más a la típica construcción reticular de los Ensanches y ocupaba todo el meandro del Arga, desde Cuatro Vientos hasta Capuchinos, y por arriba de Marcelo Celayeta y hasta el puente de Curtidores, con una gran plaza central, tal y como se puede observar en el plano adjunto. No obstante, los militares propusieron diferentes limitaciones, reduciendo la zona edificada y recordando, como en el proyecto anterior, que todo el barrio debía ser fácilmente derruido en caso de conflicto bélico. Con las correcciones el Ayuntamiento redactó un nuevo proyecto bajo la dirección de los arquitectos Angel Goicoechea y Manuel Martínez Ubago. El proyecto se presentó en 1901 y no prosperó fundamentalmente por dos motivos: el problema que plantearía a la ciudad la división de la ciudad en dos núcleos y porque finalmente el 19 de octubre de 1901 llegó una Real Orden que autorizaba el deseado derribo de las murallas y la deseada extensión de la ciudad hacia el sur. No obstante aun habrían de pasar 14 años hasta el inicio del derribo de las murallas en 1915 y algunos años más hasta la construcción de los primeros edificios en el Ensanche. Y es que entre otras condiciones que el Ramo de la Guerra imponía al Ayuntamiento de Pamplona estaba el de erigir un nuevo recinto amurallado (desde la Ciudadela pasando por el Fuerte del Príncipe hasta la ripa de Beloso) como veremos en una próxima entrada en las que seguiré hablando de los sucesivos proyectos del Segundo Ensanche anteriores al definitivo de Serapio Esparza y de la constante pugna con las autoridades militares.
Planos: Archivo Municipal de Pamplona. (AMP). 1º plano. Proyecto del ensanche de Rochapea-Estación (1885). 2º plano. Proyecto del ensanche de Rochapea-Magdalena-Estación (1899).