A propósito del Torino y una rotulación descubierta en la obra del local
ACTUALIZADA. Hace un par de semanas, el alcalde me hacía llegar una foto de las obras que se estaban acometiendo en el antiguo bar Windsor (nº 3 de la plaza), el local que sucedió en 1973 al mítico bar Torino que abrió a comienzos del siglo XX en este local y que junto al local anexo, el nº 2, donde hasta hace poco estuvo la cafetería de la sociedad cultural Laba Elkartea dará pasó a un nuevo y gran proyecto hostelero, ignoramos si recuperarán el viejo nombre, aunque la sociedad que lo impulsa se llama Torino Berria y es actualmente titular de ambos inmuebles. Sería lo esperable. En esa foto que me han hecho llegar y que adjunto a la entrada puede leerse con bastante nitidez Imprenta y Encuadernación. ¿A que imprenta se podía estar refiriendo?. Revisando todos los negocios de imprenta, librería y encuadernación de la segundad mitad del siglo XIX, solo hay uno que aunaba en su denominación y publicidad imprenta y encuadernación en esta plaza y es la de Fortunato Javier Isturiz (1880), sin embargo el libro sobre «La imprenta en Navarra» lo sitúa primero en el nº 11 y luego en el 17, lo que me hace albergar muchas dudas sobre si realmente esta era la imprenta que hubo varias décadas antes del bar Torino (en el nº 3) o si está equivocado el libro en la ubicación. Además en la mayoría de las imprentas de aquellos lejanos años de hace siglo y medio también se encuadernaban libros aunque no se anunciase públicamente y se hacían suscripciones a libros y periódicos.
A lo largo de la segundad mitad del siglo XIX encontramos en la plaza del Castillo, entonces plaza de la Constitución, numerosas imprentas. Cito todas y cada una de ellas, empezando por las más antiguas y acabando en las las más modernas. Entre las más antiguas estaban la imprenta y librería de Teodoro Ochoa, en el nº 40 de San Nicolás, esquina a la plaza del Castillo y datada e torno a 1850. Ese número no puede estar bien, por lo que me inclino a pensar que se refiere al 4 de San Nicolás y no al 40. En torno a 1854 encontramos la imprenta de López en el nº 40 de la plaza del Castillo. En 1856 Darío Aguirre imprimía en el nº 44 de la plaza del Castillo si bien en 1863 se traslada al nº 26 del paseo de Valencia. En 1860 Saturio Bandrés regentaba una imprenta en el nº 13 de Espoz y Mina, trasladándola en 1867 al nº 17 de la plaza de la Constitución. En 1866 tenemos la imprenta y litografía de Ripalda, hasta 1874 en el nº 34 de la plaza y en 1867 aparece la imprenta de Román Goñi y Alonso en el nº 27 (anteriormente estuvo en el nº 23 de Comedias). La popular imprenta y librería de José Montorio (1880), desde 1886 Hijos de Montorio la teníamos en el nº 32. En la última década del XIX aparecen las imprentas de Juan Sanz en el nº 13 de la plaza (1890) y tras ésta y en el mismo número la imprenta y librería del Diario de Avisos (1899). Como se puede ver ninguna imprenta de las conocidas aparece en el nº 3 siquiera temporalmente. Miguel Izu considera que es un vestigio de la imprenta de Miguel Ignacio Cosculluela, de finales del XVIII y principios del XIX. Parece, según Izu, que en 1805 Cosculluela trasladó la imprenta a la calle Mercaderes.
Lo que si tengo documentado es que en el nº 4 estuvo la farmacia de Marcos Sola, al menos desde 1900. La farmacia se mantuvo hasta 1905 fecha en la que se inaugura un despacho de vinos y licores en ese mismo número llamado «El Torino». El primer titular del negocio de este negocio fue Jenaro Pascual que tenía, además, otro despacho de vino en el número 12 de la calle Zapatería. El local se traspasó en 1908 siendo adquirido por José Dihinx Vergara quien coloca a Melitón Ariz como encargado del local. Poco después Ariz abre justo al lado, en el nº 3 el bar Torino, recuperando el nombre del despacho de vinos aunque también funciona como casa de comidas. En este lugar había estado hasta 1897 la Casa de Nogues (1882) y luego la platería de Modesto Lafuente Basterrica, por lo que la imprenta que se ha descubierto debió estar antes de 1882. Sería interesante que alguien diera un poco más de luz sobre esta incógnita. Yo apuesto a que sea alguna de las imprentas que he mencionado anteriormente, y que la localización que aparece en los libros de alguna de ellas esté equivocada. En 1920 fallece Melitón Ariz y recoge el testigo Doroteo Cotelo Arejula. En 1929, Cotelo amplia el local al hacerse con el local adjunto situado en el nº 2, convirtiendo este espacio en el Nuevo Café Torino. Se convierte así y hasta su cierre en 1971, por fallecimiento de Doroteo en uno de los clásicos de Pamplona, lugar de tertulias y reuniones como lo eran o lo habían sido hasta entonces el Iruña, el Kutz, el Txoko, el Bearin o el Suizo, todos ellos en la plaza del Castillo. En este local también recaló alguna vez Hemingway aunque no fuese uno de sus preferidos, como si lo fueron otros. Estos dos locales del Torino, el nº 2 y el nº 3 serían ocupados, tras su cierre, un par de años más tarde, por una sucursal de la Caja de Ahorros de Navarra y el Windsor Pub (1973). La sucursal cerró hace algunos años, tras la desaparición de la Caja, y tuvo algún inquilino creo, pero de fugaz permanencia, hasta ser ocupado por la sociedad cultural Laba hace tres años en 2022.
Fotos: Nº 1: Obras en el desaparecido Bar Windsor (antiguo Bar Torino).Desconocido (de momento). Marzo 2025. Nº 2: Anuncio del Bar Torino en la Guía de Navarra para 1921-22. Anuario Comercial. Nº 3: Tras el cierre del Nuevo Café Torino y del Bar Torino. enero 1971. Zubieta y Retegui. AMP